El 25 de noviembre de 1856 en Vladimir (Rusia) en el seno de una familia castrense aunque con cierta tradición musical, nacía el que posiblemente sea el compositor ruso con más técnica de la historia.

       En 1866 comienza a estudiar en el Conservatorio de Moscú, allí será alumno de piano de Eduard Langer en 1869, de teoría musical de Nikolai Hubert y de composición de P.I. Tchaikovsky, y ya en 1871 de piano de N. Rubinstein.

       Como pianista debutaría en 1875, teniendo la oportunidad de estrenar durante su carrera todas las obras para piano de Tchaikovsky al tiempo que formaba un famoso dúo con el violinista L. Auer.

       Tras una estancia de dos años en París desde 1876, donde se relaciona con Fauré y Saint-Saëns, regresa a Moscú para impartir clases de armonía y orquestación en el Conservatorio sustituyendo a Tchaikovsky. Curiosamente irá ascendiendo y ocupando diversos puestos como profesor en el Conservatorio de Moscú sustituyendo a los que fueron sus profesores. En 1880 reemplaza a Rubinstein como Profesor de Composición, y al año siguiente ocupa el puesto de Hubert como Profesor de Teoría Musical, accediendo a la dirección del centro en 1885. Entre sus alumnos más destacados cabe nombrar a Rachmaninov, Scriabin y Gliere.

       Doce meses después vería la luz una de sus obras más importantes, la ópera Orestella.

       En 1889 Taneiev renuncia a su cargo de Director del Conservatorio moscovita para dedicarse completamente a la composición, aunque continuó impartiendo clases hasta 1905, año en que la represión tras la revolución y las presiones políticas hicieron que dimitiera de su cargo.

       Años antes habíua tenido la oportunidad de trabar amistad con L. Tolstoi, (1895), amistad que se rompe a causa de los celos del escritor que creía que su esposa tenía una aventura con el compositor.

       Taneiev moría en Moscú el 19 de junio de 1915 a los 58 años de edad.

       Compositor cosmopolita al que apenas influyó el folklore ruso, y admirador de la música barroca y renacentista, gozaba de una técnica contrapustística admirable que siempre supo plasmar en su obra gracias al sentido crítico que tenía de sí mismo.